domingo, 28 de abril de 2013

Ausencia remota

Entrar en la misma habitación. Entrar y sentir el frío de la estación que cambia. Entrar en penumbras y ya no encontrar el verano en la cama revuelta. Encender la luz y ver el orden inmaculado, la cama tendida que no espera nada. Mirar los rincones que guardan memoria. Mirar las cajas y saber que adentro sus palabras duermen eternas. Mirar los ángeles con miradas de intercesión. Mirar por la ventana el jardín desnudo como flechazo de realidad, testigo de promesas incumplidas. Entrar en la misma habitación donde él nunca estuvo (aun estando) y comprobar que ya no está más.


Entrar, no encontrarlo e ir a buscarlo. Se nota que de magia, vos, nada!

sábado, 27 de abril de 2013

Metamensaje

Cómo odio que se mezclen las estaciones! Este amanecer de brisa suave es de febrero, no de abril. Este calor que invita a la postergación es de enero. Abril debería ser todo sol y crujientes hojas secas, algo de lluvia y anuncio de invierno. Maldito verano que no se quiere ir y se empecina en permanecer con todos los recuerdos repitiéndose a sí mismos. Es un mensaje tan enorme que para leerlo es necesario dar varios pasos atrás. Nunca antes fue así -ni siquiera parecido- y por eso es tan grande la certeza... Es esto. Es ahora. Por algo abril es tan enero.

viernes, 5 de abril de 2013

Abril destino

Sorprendida por el otoño que tanto esperó, las palabras suspendidas, La Maga aguarda. Abril llegó, preñado de expectativas fecundadas en un verano cuyos ecos no cesan. Derrumbado el penúltimo obstáculo, nada más queda por hacer que abrir las manos y esperar que el viento arrebate el diente de león. No quedan planes ni estrategias: sólo el tiempo sin brújula y las chances ciegas pueden desplegar el último puente que queda por cruzar. Él ha dicho un sí vacío de esperanza, y La Maga sabe -desde antes- que completar los doce trabajos no sería simple: ha de hacerlo por los dos. Pero quiere hacerlo. Brilla tanto, allá, al final!